César Laragnee, Rubén Rossi, Mario Cesarín, integrantes del Departamento de Fútbol Amateur del club River Plate estuvieron el lunes en Bolívar observando jugadores de las clases 1986 a 1992. Antes realizaron una conferencia de prensa en Zoom.
César Laragnee, Rubén Rossi, Mario Cesarín, integrantes del Departamento de Fútbol Amateur del club River Plate estuvieron el lunes en Bolívar observando jugadores de las clases 1986 a 1992. Antes de las pruebas, dieron una conferencia de prensa en Zoom para detallar el motivo de su visita y el trabajo que el club de Núñez lleva adelante con las divisiones inferiores.- Vinimos a Bolívar a raíz de un acercamiento entre Barracas y River, y tenemos la intención de observar jugadores aquí porque creemos que la ciudad está enclavada en un centro neurálgico muy importante en lo que a fútbol se refiere. A través del diseño que hace la gente del Area Selección, donde quienes me acompañan, el licenciado Cesarin está en la parte oranizativa y César Larragne es uno de los veedores -junto con Jorge Mamberto, Daniel Onega y José Curti- hemos venido a evaluar aquí porque creemos que podemos encontrar algunos valores que nos puedan ser útiles, y a su vez, cumplirles el sueño de jugar en un club grande (R.R.).
En una evaluación, ¿cuáles son las condiciones que más buscan en los chicos?
- Lo que más buscamos es que sepan jugar. Creemos en el viejo y querido fútbol argentino, en el talento de los argentinos, en la genética, y en una serie de condiciones que han hecho que el fútbol nacional ocupe uno de los primeros lugares en el mundo. Eso es algo que no se puede comprar ni se puede adquirir, se transmite a través de los años. El fútbol es instinto puro, es la sublimación del engaño, y venimos a buscar jugadores que tengan esa riqueza (R.R.).
River no hace hincapié en las condiciones físicas...
- Nosotros no creemos en las condiciones físicas porque estamos convencidos de que el talento no se puede medir con cintas métricas ni con cronómetros. Esas son las viejas historias de las medidas y la antropométrica que se utilizan como guía para el desarrollo de las cualidades físicas de los individuos; pero no nos sirven para determinar a priori si un chico va a ser un futbolista de nivel. Voy a dar un solo ejemplo: si yo les dijera que tengo un chico que mide un metro setenta, pesa 72 kilos, no sabe patear con la pierna derecha y no sabe cabecear, a priori ustedes me dirían que quedaría afuera de la selección, pero nos acabaríamos de perder a Diego Maradona. Por eso no nos interesan las medidas, nos interesa que jueguen bien y como dijo Jorge Valdano: «a los buenos y a los malos jugadores los descubre cualquiera, el problema son los del medio», a esos son los que River trata de buscar (R.R.).
¿En qué van a consistir puntualmente las pruebas?
- Las pruebas simplemente consisten en dejarlos jugar. Se habla mucho de los aspectos científicos del entrenamiento y demás, pero no hacemos tanto hincapié en eso. He tenido la oportunidad, por mi profesión, de participar de numerosos congresos internacionales y estar en permanente contacto con gente de todo el mundo, y siempre me acuerdo de lo que me dijo el coordinador del Real Madrid, el profesor Roberto Giraldés: «nosotros le vendemos a ustedes programas de entrenamiento, metodología y libros pero la realidad es que a los jugadores nos los mandan ustedes» (R.R.).
¿Cómo evalúan ustedes la situación del fútbol infantil hoy en la Argentina?
- La vemos bien. Si nos referimos a nuestro club, históricamente nos ha ido muy bien. En cuanto a nuestro trabajo, yo soy un proyecto de las inferiores de River y en toda época se han «sacado» jugadores. Ahora son muchos los clubes que buscan pibes, y muchos que hacen lo mismo desde la parte privada, pero en general el trabajo del fútbol infantil y del amateur es muy bueno (C. L.).
¿Qué le ofrece River al jugador del interior a cambio de su talento?
- En cuanto a su educación y a su normal desarrollo, River ofrece todo lo que un chico debe disponer: estudios, seguimiento, cuidados... Creo que los padres de los chicos que están en River pueden dar una opinión detallada de lo que River les ofrece a sus hijos (C.L.).
- Hay un punto que es necesario aclararlo: llevar jugadores a probar es muy fácil; pero los clubes a veces se convierten en depósito de jovencitos y de niños, lugares donde al chico se lo deja y nada más. River ha creado un Area Psicológica compuesta por tres psicólogos; tiene un Area Educativa -se firmó un convenio con un instituto en el cual se les brinda apoyo escolar en las materias que tienen problemas-; se ha creado un Area Social y se ha salido casa por casa en un convenio que se hizo con la Universidad del Museo Social Argentino, donde hay nueve asistentes sociales que trabajan con nosotros, y además hay un nutricionista que se ocupa de la alimentación. El jugador recibe absolutamente todo, porque precisamente hablamos de la formación humano-deportiva del individuo. Todas las áreas trabajan interdisciplinariamente con un único objetivo: potenciar al deportista, que ante todo es un hombre (R.R.). }
Fuente: Diario la Mañana
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